LA NOCHE EN TI
La noche se despeña
sobre tu cabeza,
se torna cascada ondulante
en la pendiente de tus hombros,
desliza suave su sábana hasta desembocar
en la curvatura de tu espalda
Fluye en ti
como un río,
sus aguas transitan
en la piel de tu mente,
tu escuchas lo que piensa,
la sientes latir
en tus latidos pausados,
percibes su olor en el aire
que inhalas y exhalas
pendularmente
Despliega un bosque
en la cortina cerrada de tus ojos
entornado por sombras estáticas,
tus brazos son árboles
donde balbucean las ramas,
duermen las hojas y sueñan los pájaros,
tus piernas son dos arroyos
que van sigilosamente
susurrando aletadas
de peces taciturnos
Te desprende de ti misma
de tu propia consistencia y peso,
tu mirada es un alma sonámbula
tomando al viento entres sus garras
que se ve a sí misma mirándote
voltea hacia fuera
y solo ve hacia dentro,
donde el tiempo no son horas,
son cosas y en todas ellas
está tu fantasma
De pronto un remolino
absorbe lo noche en su centro
una claridad ácida consume sus plumas,
la cosas se disipan,
son las 6 de éste mundo
El día abre sus puertas
y te reclama
sus manos de sol chocan
y te gritan: ¡despierta!
ya no le perteneces a la noche
y tú no recuerdas nada…