Apenas están los que dicen
que es la justicia injusta.
La justicia es un don
que nace de un alma justa
Si no hay justicia
el cuerpo se deteriora,
se consume poco a poco,
los valores se disipan.
Dicen que no hay justica,
¿quiénes?, ¿quién podría jurar
que siempre fue justo?
Es una dulce palabra
que debe susurrar en el Pueblo,
antes de difamarla
con la infamia más corrupta.
No hay justicia cuando la equidad desfallece,
cuando la conciencia se desvanece
en medio de la oscura realidad.
No hay justicia cuando el derecho no existe,
cuando el castigo es vano
y la condena inmoral.
No hay justicia cuando la insolencia se eleva
y con ella los principios van cerrando su labor.
Aquel que proclame justicia debe mirarse a sí mismo,
contemplarse en su interior para buscar al concepto,
definirlo, analizarlo, contrastar su propia vida
con la realidad que lo rodea y con sí mismo a la vez.
Y entonces sí será justicia poder vivir con la razón.
CARLOS A. BADARACCO
26/4/14
(DERECHOS RESERVADOS)
Se advierte que se es humano cuando se puede ver en el “otro” una luz perpetua en su interior, esa es nuestra esencia absoluta. Si está encendida en el tuyo eres humano seguro.