QUE LA VIRGEN TE ACOMPAÑE
Por aquí pasaste ufana con tu andar muy arrogante
Eras joven, eras bella, y eras la mar de sensual,
Te seguí, te alcance pronto, y en tus ojos, al mirarte
Vislumbre que tu alma en pena buscaba felicidad.
Caminamos, nos sentamos, conversamos y expectantes,
Convinimos reencontrarnos para volver a charlar,
Y así fue, nos encontramos, decidimos ser amantes
Y al amarnos nos amamos con todo y a todo dar.
Por aquello de la vida de que todo nace y muere
Nuestro amor se diluía cual se diluye la nieve
Y tú te fuiste alejando con tu sensual caminar,
Y yo me quede pensando: el dinero todo mueve,
Y como es poco el que tengo, mi verso no te conmueve,
Que la virgen te acompañe y libre de todo mal.
fernandoelgrande