Enamorado de los números, vivimos sumergidos en un mundo corporativo que a veces nos asfixia,
dejándonos sólo un sentido vacío de la vida.
A menudo los manejamos para sacar las cuentas o revisar las estadísticas,
están tan inmersos en nuestro día a día que separarlos no podría.
Son para todo la medida aunque hay medidas que no se pueden expresar en números,
tiempos o espacios, sin embargo muchas veces lo intentamos.
Enamorado de los números, empiezo contando casi siempre por el uno,
me detengo en dos, pues para mí bastamos tú y yo.