Me pasé la vida soñando despierta,
que cuando desperté, me encontré ya vieja.
Los castillos levantados eran bruma
y los amores buscados se escondieron.
Me pasé la vida esperando
sin saber qué era lo que esperaba
y en medio de la ruta hoy me encuentro
con las manos vacías y los ojos cansados.
¿Para qué descansar sobre las nubes?,
si al final, el cielo es el vacío.
¿Para qué caminar sobre las aguas
si al final, no llego a pisar tierra.
¿Para qué imitar el vuelo de las aves?,
si al final, desciendo sin hacer nido.
¿Para ´qué amar, si cuando he amado,
dejaron mi corazón acongojado?
Buscar, siempre buscar fue mi destino
y de tanto buscar perdí la ruta.
Pero a pesar de todo aquí me encuentro:
¡Amando, buscando y esperando.!