-“: Unos viven, otros lloran, algunos más mueren
Pero así es amor”
Tú tan torpe, tan ciega, tan llena de oscuridad te vacías, te entregas,
Tú perversa, mezquina y esquiva amante de labios
Dejas abierta, quemante, viva mi muerte.
A las puertas de las iglesias profanas mendigas amor.
Ciegas tus ojos en mares de soledad… mientras lloras por amor.
Tú, mi pequeña muerte
Me destierras, me condenas a adivinar en tus ojos,
en tu sexo
en tu olor
en tus pasos
un pretérito que mata, que lapida desde atrás.
Pequeña ciega…
nacimos muertos…y, sin embargo,
Al final de la agonía “la muerte es la huella de que algo vivió”.