Mi señor soñando
en él atardecer frío
sin vida
extraviada en mis sentimientos.
apasionada de lo
que no puede ser
tu separación de mí
barrotes de hierros
vestuario blanco.
llegar hasta tu jardín
para acariciarte
darte un beso ardiente
rozar tu piel lentamente.
decirte al oído te amo
reiterar “te amo”
como en el pasado
en mis tardes
te imagino.
como a aquellas noches
ardientes, apasionadas
tus ojos grandes y profundos
como los luceros que nos alumbraban.
hablabas de tu auto
que deberías comprar
de las metas
querías lograr
aquí de pie frente
a este papel
amigo, te aguardo.
mi amor , mi amo
perdida en mis recuerdos
sin poder contemplarte
sin poder amarte…