Hoy me entere recién de tu partida,
mi querida amiga, mi compatriota,
aquí me diste tú la bienvenida,
me aconsejabas y tomaba nota.
Te brindo mis aplausos, pues la vida
brotó en ti hecha poesía, y devota
cultivaste sin darte por vencida
ese verso que al portal hoy le brota.
Hoy brindaré por este tu adelanto,
te sonreiré desde este graderío,
porque tu ausencia provocó mi canto,
Un canto que no solo ha sido mío,
sino de todos quienes entre tanto,
riegan con versos tu lugar vacío.