No dobles en la esquina!!
Grito desesperado el cerebro
pero en ese momento
no pensaba solo actuaba,
por instinto, quizás.
Sabiendo el desarrollo y final
camine,
no sigas!! No sigas!!
repetía mi raciocinio
cautivo en el corazón.
Un zombie tiene más cerebro.
Por favor, no mires a tu derecha!!
Y mire....
Era ella, sentada en una banca
fuera de su casa
entregando su amor.
Era ella lejos de mí.
Porque corazón?
Porque!!? me traes hasta aquí…
Decía sollozando el cerebro.