Jorge Garcia de la Fe

Cuando te vas, amor, mi cama es

Cuando te vas, amor, mi cama es

un gran revolcadero de ternura.

Quisiera que me dieran sepultura

feliz en el tablero de ajedrez.

 

Voy recogiendo lento ese desastre

con todos los sentidos bien sintientes.

Encuentro peces todavía vivientes;

le has dejado a mi globo mucho lastre.

 

Cuando te vas, amor. ¡Ven otra vez

lo más pronto posible!; no soporto

este lecho estirado; yo te exhorto

 

a que vires la sábana al revés.

Cuando te vas, amor, mi cama es

un corazón que se ha quedado corto.