A veces te busque arriba, en los blancos y azules,
y solo encontré los colores.
A veces te busque en un ejercito de estrellas,
y porque el universo no es estéril no pude hallarte.
Seguro estuviste en la sepultura de la rosa,
en las ultimas oraciones de un cielo perdido.
De seguro exististe, claro que inadvertida y escapista,
sin pensar que al salir la rosa se adivina su historia.
A veces pudiste ser tocada e ilusión,
seguro siendo a veces lo que me dejan los ojos cerrados,
seguro siendo una frase entre los libros del mundo.
Humberto Velásquez Jiménez
12/Septiembre/2015
6:26 p.m.