Nada es eterno, nada, árbol de primavera…
Guardarás tus hojas caídas en otoño en las entrañas de la tierra
Las guardarás para podrirse y renacer en primavera
Pero… realmente nada es eterno:
¡Caerás por la furia de un rayo!
¡Por el filo del hacha!
¡O por la guadaña del tiempo y no regresarás!
Nada es eterno…
Ni este verso…
Por fortuna…