Todo aquello que cultivas
un día florece;
florece el huerto, el jardín,
el campo florece.
Todo aquello que recibe luz
más bello se ofrece;
el árbol, la flor, tus ojos...
con la luz embellecen.
Si cultivas tu mente
al tiempo florece;
si iluminas tu ser
cada día, se embellece.
Cultivemos el terreno
donde la paz crece,
y que la luz ilumine
los corazones y las mieses