PAISAJE
Quiero amarte
con el consentimiento de Dios
sin pecado concebido,
siendo uno y no dos.
Con la claridad rojiza
de la soledad aguardando el amor
sin ataduras ni normas,
o contratos reiterativos.
Quiero amarte
más allá de palabras y verbos,
contratos y firmas,
enredos e injusticia atroz.
Con la claridad rojiza
que trae cada tarde el sol
sin piedad, protocolo
o disculpa a la razón.
Quiero amarte
sin preambulos de silencio,
intemperie a mi carne
y su palpitar que eterniza.
Con la claridad rojiza
crepuscular en deseo
extraditando paisajes,
pronombres, tintas y versos.
Quiero amarte
pajiza, inconciente,
en candente caricia
sin tiempo o reloj, rojiza
... sin tinta, sin voz.
Tizzia Holwin
Óleo sobre tela:
Raúl Arturo Díaz Sánchez