Me levanto muy temprano
Y me pongo a caminar
A la orilla de algún río
que cantando se me va.
Mientras los gansos silvestres
Van volando sin parar
Y las piedras del camino
Me saludan al pasar.
Me recuerdan a mi nieta,
A mis hijos, a mi suegra
Y a la vida de mi amor.
Una noche desde siempre
Me gustaría escribir
Aunque tenga sin quererlo
Pocas cosas que decir
Siempre y cuando las palabras
Que una quiere compartir,
Aparezcan en mi mano
A la hora de pedir,
Formando una cadenita
De un rosario de cristal,
Y la voz de una calandria
Me despierta al repetir
Mis poemas con anhelos
De poesías sin fin.