Aaron Krauss

La hora

Miro el reloj y son las 3.
Dejo de hacer lo que estoy haciendo para darme un respiro y regreso y veo el reloj.
Son las 3 con 15 y no se que pasa.
-Por alguna razón las cosa me invitan a pensarte-
Dan las 3:20 cuando eres ya lo único que tengo.
De repente me sorprendo mirando hacia la nada,
diciendo te amo.
Como un tonto.
Como debe ser.

¿Esta mal amarte tontamente?Absurdamente. Locamente.
O, ¿prefieres, tal vez, ese amor de calendario
cuando en febrero te debo querer más que en mayo?

Son las 3:30 y quiero correr a verte.
Quiero liberar estas palabras que como el deseo se vuelven cada vez más incontenibles.

Quiero verte, sentirte y entre otras cosas, quiero decirte que te amo.
Necesito decirte que te amo.
Porque escribir no libera nada.
No si la libertad está en que me escuches.

¿Y entonces?

¿Te parece bien si nos vemos donde siempre
y te digo que te amo,
y te amo absurdamente,
a la manera correcta.
como siempre nos amamos
como siempre te amaré?.