Castígame oh Dios,
enciérrame en sus brazos,
dame la libertad de vivir en sus lazos,
destiérrame de este mundo,
haz que me pierda en lo profundo,
de la oscuridad más intensa,
y que junto a ella sea extensa.
Haz de mi vida,
una perpetua existencia,
que su sombra sea mi esencia,
sus dedos en mi piel mi sentencia,
y que sus labios no me den clemencia,
qué me queme su presencia,
y que sea su mirada mi conciencia.
Amárrame a una cadena,
qué su materia sea obscena,
qué sea su abrazo mi vida plena,
pues por ella mil faltas cometo bajo la luna llena,
esperando que mi pena sea eterna,
y que mi prisión de ella esté llena