Hoy transcurren los instantes en mi alma
y espera que llegues en esa palabra
que parece muda, que me calcula ciega
y no le temo, porque ella sabe
que es mi amor sin transitar
que palidece de dolor porque no estás tú.
Le falta agua al surco de la tierra que ante mí
se eleva como misterio que busca luz.
Me falta la sonrisa de la tarde aquella
donde tu brisa me acariciaba toda
y mis manos tocaron tus cabellos sueltos al azar.
No me enseñaste a aceptar tu ausencia
y me toco los labios con suavidad
para saber que esa humedad
se debe a la necesidad de sentirte,
de llamarte sin herirte… pero tú no estás.