“Revolución con paz y honestidad por la vida”
Que hiciésemos una revolución no de izquierda
es mi sueño dentro de mis utópicas fantasías
de derecha mucho menos, ni para qué pensarlo
una descabellada y absurda contradicción sería,
me gustaría que fuese de un equilibrado centro
en lugar de lucha de clases, una perfecta armonía
donde el trabajo sea con equidad y justicia
y unidos tengamos el pan nuestro de cada día;
una revolución con verdadera racionalidad
recordando el amoroso mandato del Mesías:
Que cese la ambición de los que más tienen
y los pobres no aspiren capital con holgazanería
pues quien ama a su prójimo como a sí mismo
no ha de utilizar armas en actos de cobardía,
que las armas sean en todo caso de utilidad
en pro de la agricultura, la salud y la pedagogía,
que se logre erradicar ese perverso paradigma
son falsos dividendos, el facilismo e hipocresía
con zamuros o ratones cuidando carne o queso
en una ONU y en un Consejo cual villanía
las potencias armadas de ambos bandos
son fabricantes de guerras en tropelía.
El camino de la constancia y del esfuerzo
nos lleva a recolectar frutos de gran valía,
una revolución humanista donde sus líderes
entiendan que el orbe es herencia compartida,
ya basta de ideologías caducas o avasalladoras
el futuro es una causa común pero comprometida
el pasado nos enseña cruelmente con la aclamación
del revolucionario Barrabás una lección aprendida,
luego para que se cumpla ese anhelado sueño
se requiere de consciencia con tesón e hidalguía,
Padre nuestro que estás en el trono eterno
Ilumina a tus hijos, hoy en guerra fratricida.
1143 22/09/2015