Con los brazos rondando por tu cuello
con los dedos que atraviesan el sendero de tus piernas
con la palabra oportuna conquistando tu oído
con el silencio de mi voz desnudando el alma
Con una taza de café en medio de la tarde
con un beso sincero cuando menos te lo esperas
con el pecho abierto para que mires los sentimientos
con la mirada que refleja las líneas de tu cuerpo
Con el sexo destinado a romper los esquemas
con una serenata penetrando en la noche
con un corazón dibujado en la puerta de tu casa
con mis labios leyéndote un poema
Con el cuerpo muriendo de frío en tu ausencia
con la inspiración que me da tu sonrisa
con la paciencia de una noche entera en tu boca
con la suave canción que susurran tus cabellos
Con una flor encontrada en el camino
con el valor que michas veces no encuentro
con algún verso que escribí durante el día
con el mismo miedo de tenerte tan cerca.
¡Ahora entiendes porque digo que te amo!