No quiero morir así,
con la añoranza de otras vidas,
con un cofre lleno de tesoros,
remembranzas en el tiempo diluidas.
No quiero morir así,
cargando a cuestas tantas noches de desvelo,
con la memoria perdida entre las sombras,
rostros sin nombre de un pasado disoluto,
No quiero morir así,
con los ojos secos
ensordecido por el ruido del silencio,
besos marchitos inundando los labios.
No quiero morir así,
con el alma envejecida,
con la piel árida y un corazón vacío,
con las manos llenas de caricias ausentes.
No quiero morir así,
¡no te vayas!
no quiero morir sin ti.
SALO.