De tus caderas frondosas
Me cuelgo con mucho empeño,
Porque quiero ser el dueño
De tus carnes vaporosas.
De tus pechos fiel me prendo
Como un niño desnutrido,
Con un ritmo bien medido
O desespero violento.
En tus labios me detengo,
En ese mordisco hambriento
Mientras que me va creciendo
El calor en mis adentros.
Entre tus muslos me adentro
Cual navegante perdido,
Intuyendo aquel destino
Donde mis ganas concentro.
En tu humanidad me tiendo
Y en unidad me confundo,
Y me aparto de este mundo
Cuando profundo me siento.
Ya lo he dicho y lo repito:
No es mero placer el mío,
Y tampoco es extravío,
Es amor, a cuatro vientos lo grito.
Autor:
(VOZDETRUENO)
Imagen de internet