Soñé que todo el azul del cielo
y todo el azul del mar,
era para mi vida
tu corazón puesto en un altar.
Soñé que tus besos tibios
y la pureza del agua,
eran el azul del cielo
que a mi corazón
hacía estallar.
Soñe que volaba
en un unicornio azul
y en todos los lugares
te encontrabas tú;
y juntos cabalgábamos
sin conocer el final
de nuestro viaje,
soñé que el horizonte
era tu amor esperándome.
Y tu boca pronunciaba
dulcemente mi nombre
y tus brazos y tu cuerpo
eran solo para mi.
Soñé que todo tu amor
era la inmensidad del mar
y juntos de la manos
al cielo nos disponíamos
a escapar.
YOLANDA BARRY.