Sabes bien que es así,
porque el amor nos vuelve frágiles
perdemos la voluntad animal
y hasta las ganas bacterianas de vivir,
todo lo sacrifique por ti
para enamorarte me convertí en otro
mis cabellos bolivianos hirsutos
como pullas de puerco espín
a punta de gel amansé
hasta que me aceptaste
hasta que me parecí al que tu querías,
algún tiempo estuvimos juntos
un tiempo de felicidad para mi
y de experimentación para ti
que podía hacer conocía mi destino
pero yo insistía mucha más colonia
y un gel mucho más poderoso
para domesticar mis cabellos espinosos
fruto de la raza americana nuestra,
cambie de estrato y empleo
te envite a muchas otras partes
hice curso de humor forzado
practiqué el Kama Sutra todo
me encomendé a los santos
y firme pacto con el diablo;
con mis ahorros compre gel importado
para dominar mis cabellos punzantes
la única herencia de mi fuerte padre
que también como tú nos abandonó,
algo pasaba contigo
estabas tan distante
buscabas tantos pretextos
te enfurecías por nada
tus amigas te traían chismes frescos
y suspirabas ante una flor foránea,
todo te perdonar
que me hallas dejado
usufructuado, manipulado y mentido,
lo único que no puedo perdonarte
es que por conquistar y conservar tu amor
y por las toneladas y el exceso de gel
me haya quedado calvo.
JOHN WILLMER