Pensé, como se piensa que una estrella brillaba sólo para uno,
Pensé, como una niña asentada en la orilla y cree que las olas sólo vienen a verla,
Pensé, como se piensa que tu amor era mío o para mí.
A cada amanecer respirado, a cada anochecer pasado, les comentaba sobre ti,
Aquellos que te habían visto más que yo,
Aquellos que te miraban cerrar o abrir los ojos tuyos al mundo,
Que aun te cubren cuando mis suspiros ya no alcanzan a tu presencia.
Amor, gracias por haberme dado esas ganas locas de amarte,
Pero a esto que llevo dentro le faltas tú, todo tú,
Me faltan tus manos,
Que tienen por recorrer muchos senderos,
Me faltan tus brazos,
Para atrapar mi cuerpo escurridizo,
Me faltan tus piernas
Para enredarse con las mías.
Me faltan muchas cosas de tí
Que dejaste en mi mente,
Llena de delirios de amor y pasión contenida.
Roces de carícias y emociones incumplidas,
De palabras y poemas robados al viento para nuestros oídos.
Aquí espero como siempre,
Pero si no vienes,
Prepárate que voy a buscarte...
Vera.