Sebafel

La noche de mi muerte

¡Oh qué hermoso será

verme tendido en cama moribundo!

Esa noche no habrá

en mí pena ni luto

sino paz por dejar al fin el mundo.

 

¡Esa noche será

el día que mis ojos nunca vieron;

luz cuya claridad

me recordará el tiempo

vacío en do mis días nunca fueron!

 

Ya no preguntaré

el motivo la causa o la razón

del nacimiento cruel

que por maldad o amor

entre sollozo y pena aconteció

 

Ya no me quejaré

a mi padre y mi madre del dolor

inmenso de nacer, 

de conocer el sol, 

de haber llegado a este mundo atroz

 

La noche de mi muerte,

esa noche, será una bendición.

Esa noche la suerte

hará que diga adiós,

finalmente, a mi vida sin razón.