ramirez y anguita

YO CONMIGO

 

Seis angelitos y San Francisco

bendicen a mis poemas.

Ingenuo demasiado ahora

para creer que sea así,

porque de mí,

no me canso de reír y de burlar.

 

Seis angelitos y San Francisco

contemplan a mis trabajos.

Tolo demasiado ahora,

para quien ninguna fe profesa,

porque mi cabeza,

no oye mi corazón.

 

Seis angelitos y San Francisco,

en el alto de la estante,

miran a todo instante lo que escribo,

y lamentan las cosas que digo,

se santiguan y rezan mucho,

pues se parecen conmigo…