si a mi dicha se asemeja
un mar de torturas y llanto
donde ahogo cada dia
donde dejo cada encanto
donde divagan sirenas
radiantes y felices
donde persigues ilusiones
y pierdes las raíces
donde vemos que las alegrias
no son tuyas, no son mias
no son de nadie, no son nada
solo fantasmas de tu mirada
y el lugar en que mi corazón
recibe el dolor en tierno modo
y da amor, precario de tenerlo
aferrandome a creencia
viendo todo en inocencia
investigando mis miedos
tan en mi carne pegados
y cada uno de ellos
un poco radicados
si a mi dicha se asemeja
lo que en este texto tu veraz
te imaginas que estoy muriendo
te imaginas y no mas.