Tuve que andar varios años,
hasta llegar a tus pasos,
para mi era invisible el color del amor,
el desconocido,
el amor era el de otros,
aquel que mata y resucita gente,
yo lo observaba indiferente,
a la distancia,
antes de conocerte,
antes de que tu mirada intensa,
penetrara,
la atmósfera que bordea mi corazón,
con su luz inmensa,
cual rayo de sol,
ahora,
a leguas de distancia reconozco al amor,
ahora se que en tu intangible ausencia,
hay amor,
que en el suave andar de tus muslos
y en la seriedad de tu presencia,
hay amor,
el amor lo abarca todo,
por eso yo te amo todo el tiempo,
todo el cuerpo,
y todos los momentos.