Sentir que todo se para,
que el tiempo se detiene.
Los problemas sin saber cómo,
desaparecen.
Los recuerdos permanecen en sus profundidades.
Alguno que otro se escapa,
y vuelve a mí, a mis pies,
sobre su barba blanca.
Y las alegrías, bajo la arena,
recorren el tiempo
y se llevan las penas.
Mis amores bajo aquella roca.
De la palmera,
cuelga mi infancia
y en cada coco una esperanza.
Toda mi vida, aquí resumida,
en un mismo mar,
en una misma playa.