Qué difícil es quererte y no tenerte.
Qué difícil es amarte y tener que olvidarte.
Qué difícil es verte y saber que no te he olvidado;
y aún más difícil es quererte a mi lado.
Es difícil sentir esto por ti,
y no querértelo decir, por miedo a sufrir.
Qué difícil es tener miedo a enfrentar esto que siento,
esto tan intenso y sincero; que solo Dios sabrá si será eterno.
Que difícil, que difícil, que difícil;
es sentir esto y no decir nada,
simplemente quedarme callada;
para evitar problemas con la gente apreciada.