I
Querido y adorado Jesucristo
Gracias por ser parte de mí vida
Eres mí refugio y mí escudo
Cuando me encuentro en peligro
Tú siempre estas a mí lado
II
Eres la luz al final del túnel
Cuando se extingue mí fe
Eres el poderoso gigante
Que dirige y cuida mis pasos
Cuando tropiezan mis pies
III
Contigo estoy confiada
Pues nunca me desamparas
Tú abres puertas y ventanas
Donde quiera que camino
Porque tú poder es genuino
IV
Por eso se que estas vivo
Porque tú eres mí mejor amigo
Eres el aire que respiro
Eres mí amado Jesucristo
A quien yo sirvo y alabo
ENEIDA BRAVO DE ZAPATA
POETISA DE JESUCRISTO
EL BAÚL—VENEZUELA
12/10/2.015
8:25 a.m