\"Te hablaré de soñar, de querer, de vivir,/ tú me hablarás de huir y olvidar./ Yo tal vez te haga sonreír,/ tú segurísimo me verás llorar\".
Bloquéame para no saber más de mí,
para que no te preguntes qué escribí
ni cómo me comentan… o comento.
Sácame de tu Facebook ahora, hoy,
así nunca sabrás si conectado estoy
o acaso por alguna razón me ausento.
Aguanta el deseo de enviar un “toque”,
por mucho que contactarme te provoque
y trata de leer menos tus notificaciones.
Es por eso que te pido que me bloquees,
así al leer un poema sabrás que no lees
al hombre que supo alterar tus emociones.
Ve ahora a tu lista de bloqueados y revisa
y si ves que estoy, muestra una sonrisa…
te habrás librado por fin de mis locuras.
Te torturaba verme perverso y no odiarme
y quizá si me bloqueas puedas extrañarme
y descubras que te gustaban las torturas.
Pero debes bloquearme y al éxito apostar,
no lo sabes… tal vez me llegues a olvidar
y te dé lo mismo que no sea tu contacto.
Igual, si me bloqueas y no veo tu nombre,
no sabré si ya hay en tu vida otro hombre
e ignoraré si tu amor por mí está intacto.
Bloquéame, es poco lo que puedes perder,
los “te amo· que dijimos, el pasado, el ayer
y recuerdos de una canción que no suena.
Podrás entrar a los grupos y no me verás
y con el pasar del tiempo quizá pensarás
que bloquearme sí que ha valido la pena.
Te preguntarás por qué no te bloqueo…
es que no, es exclusivo en ti ese deseo,
no soy yo quien ama y no sabe amar.
Quien de sentir amor alardea, entiende,
que a amar con el alma sí se aprende
y tú nunca amor mío te dejaste enseñar.
No deseo bloquearte, yo de ti sí necesito,
aunque sea una cachetada… o un grito,
producto de celos que en tu ser estallan.
Cuando bloqueamos, los ecos se silencian,
hay palabras de despedida que sentencian
y las voces que salían del alma… callan.
Desbloquéame cuando exista indiferencia,
si no te importa ni te daña mi presencia,
momento que no te niego que me asusta.
Dirás que me olvidaste, ya casada quizá,
uno de tus contactos feliz lo compartirá
y yo, quién sabe… tal vez le dé “me gusta”.
Original de Álvaro Márquez
Caracas, Venezuela
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