El tiempo de vacaciones escolares, Aurora lo comparte con sus hijos,
ya que con anticipación, solicita en la oficina las suyas tambièn,
y asì disfruta, juegos y paseos con su familia.
Por su parte Juan Carlos, realiza algunos cursos en el exterior,
en beneficio de su desarrollo acadèmico. Espacio de tiempo,
entre èl y Aurora.
Aquel dìa, mientras Aurora organiza la casa, los niños juegan
en la piscina mòvil, instalada provisionalmente en el patio,
tocan a la puerta, y ella al abrir, algo sorprendida dice:
- Hola, ¿como estas?, si quieres pasa, los niños estàn en
la piscina
Es el padre de sus hijos, muestra en su rostro signos de tristeza,
y eso le duele en el alma, ella le hace pasar, y le dice:
- toma asiento, voy a preparar un cafè, no conviene que los niños
te vean asì.
Sentados en la pequeña mesa de la cocina, èl la mira fijamente,
un largo silencio se produjo, al parecer las palabras,
que estàn dentro del alma, ningùno se atreve a pronunciar.
- Aurora, dime que nos es tarde, para reconstruir nuestras vidas,
pasaron tantas cosas entre nosotros, pienso que juntos
lo podemos superar.
- Enrique, por mis hijos, estoy dispuesta a intentarlo nuevamente,
pasando la pàgina, y empezar de cero, porque aun te quiero.
- Aurora, que dices si nos vamos todos juntos de vacaciones,
- si mi amor, nos harà bien a todos, ¿y tu negocio?
- no te preocupes amor, hablarè con mi socio.
En el momento que Aurora y Enrique se acercan en un beso,
los niños entran corriendo, y ¡gritan!, todos a la vez
- Papà, papà, te queremos, ven a la piscina.
El repique del tèlefono, la saca de sus pensamientos,
mientras observa, a Enrique y los niños jugando en la piscina.
- Hola, amiga querida, ¿que haces?
- Hola Elvìra, tengo que hablarte, Enrique esta aquì,
lo intentaremos de nuevo.
- amiga, piensa bien lo que haces, ademàs de pensar en èl
y los niños, piensa en ti también, y si realmente aun le
quieres a èl, y dime ¿que paso con Juan Carlos?
- amiga, ahora no por favor, tengo que ordenar mis ideas.
Y asì, se van de vacaciones como una familia feliz, sin detenerse
a pensar nada mas.
Vuelve la vida cotidiana, y todo marcha muy bien, salvo algùna
que otra diferencia de ideas entre ellos, que cada vez, vuelve
con mas fuerza que antes, y Aurora cansada de tener que ceder,
ante el mal caràcter, que muestra su esposo, le hace saber
que de continuar con esa actitud tan violenta, volveràn a separarse.
y la vida continua...