Que bello es amar,
mas cual dolorosa es la sensación
de alguien tener que dejar.
Dejarle partir,
aparcar los sentimientos
y tenerte que despedir.
No derrames lágrimas,
por algo que no te deja vivir.
Piensa en tu camino,
el que te queda por recorrer,
alguien recompondrá
los pedacitos de tu corazón,
secará tus lágrimas
y de alegría te llenará.
Vive el momento,
el tiempo no pierdas,
sigue tus pasos
y aguarda cosas nuevas.