Jamas le he pedido a la vida un buen amor,
Y jamas le he reprochado las heridas,
La ternura y la decepción son parte de la vida,
Finita,
Tan finita que a muchos se les escapa al estornudar,
Tan fina que nada les parece acomodar:
Pero yo no pido tanto,
tan solo una poesía, y un velo de la noche en este canto,
Tan solo una memoria...
Y un suspiro sin dolor.