LAMENTOS DE LA GENTE
Es común en nuestros tiempos
ver lamentarse a la gente,
que no ha mucho eran ejemplos
y para el progreso simiente;
¡Verdad es, que para el indecente,
avaricia más usura son sus templos,
pues adoran al dinero preferente,
dejándoles corruptos del ejemplo!
Paseando sin pudor los hemos visto
rodeados de muchos aduladores,
dándole consejos al mixto
y así acaparar los favores;
los mismos que sus honores
es montarnos siempre un pisto,
para que sean nuestros sudores
quienes queden como deudores,
de los desbarajustes del listo:
¡Compadecerse bien está
de aquel que se lo merece,
nunca de quien adormece
a esta acomodada sociedad,
que encuentra su realidad,
cuando esta se estremece!
Joanmoypra