Mauro Enrique Lopez Z.

Nueve de la noche

Nueve de la noche estaba tan mal

que me invade la tristeza y vi pasar

una hermosura; lucias tan bella

de pronto me embargo alegría, porque mi pena

era es que no podía escribir un verso como ella;

y es como una luna llena en ese firmamento

en una noche de pesca lo bonito fue que esa lindura

me lleno de inspiración aunque no este a mi lado

le di gracias a Dios por crear un mundo de cosas bellas,

como un paisaje y con tanto amor y mis notas fueron

de dulzura ternura y mi pena desde esa noche no se de ella.