Déjame expresarte
la cantidad
de sentimientos
que afloran
bajo mi piel taciturna,
que surgen
de lo más profundo
de mi ser,
que me hacen ver
y a la vez
estar ciego.
Saber que
gracias a ti
logro ser
un alma viva,
candente,
que siente palabras
que antes eran
no más
que vanas palabras.
Eso me hace feliz.
Tan feliz.
Solo me queda
darte las gracias
por ser el alma
vinculada a un preso
el cual
ahora es libre
gracias a ti,
amor mío.