Tu voz humedece el aliento del día
Con tornado de lirios otoñales,
Tu voz mese la noche pausadamente
Y las estrellas caen como lágrimas de nieve.
Tu voz es un té añejado.
Un sonido que se fractura en mis manos.
Tu voz embaraza los estrépitos del sueño
Y fermenta el amor en nuestros dédalos.
Tu voz es un manantial donde refresco mis tímpanos.
Kike Bu
D.R. 2015