Días desamparados y nublados, días como hoy, solo dan ganas de llorar.
Días como estos, me recuerdan al pobre Werther, agobiado por su amor y su desamor.
Como habrás cruzado el Aqueronte joven Werther? Tal vez podría aprender de ti, y llegue el fin de esta discordante miseria.
Tal vez Caronte, pueda ser sobornado, no ? quisiera cruzar y regresar, ya que quien ha sido puesto frente a la muerte, gana un mayor sentido de la vida, sentido que hoy ya no poseo.
Así de doloroso fue el amor prohibido, y no correspondido joven Werther? O fue Goethe el culpable de tu desventura?
Fuese como fuera, nunca viste la sonrisa de tu amada? No te inundo el verla llena de felicidad, de ilusión y esperanza?
Ay! Querido Werther, no soy Guillermo, pero créeme que te comprendo, sin embargo, no sé qué hacer, puesto que cada día la puedo ver feliz, no como yo quisiera, siendo motivo de su alegría, pero aun así, ella, es feliz.