Soñé que los mudos hablaban,
Soñé que los ciegos veían,
Y soñando lo imposible...
soñé que tu me querías.
Sé que fue un error para ti
el hecho de haberme conocido,
pero desgraciadamente
no me puedo alejar de ti,
y afortunadamente, nunca
olvidaré que mi alegría,
siempre estuvo en ti.
Sofía Q. L.