Tus ojos son la dulzura de tu alma,
El brillo de tu espléndido ser;
En ellos se refleja la calma,
El aliento del amanecer.
Yo los amo, sí; amo tus ojos
Los amo como a tu boca;
Como amo tu pelo y tu cintura,
Como amo la silueta de tu figura.
Ámame tú con tus ojos,
Como yo a ti y a tus ojos.
Ámame como a tus mismos ojos.
Átame a tu tierna voz callada:
Enciérrame en la prisión de tu hermosura,
E ilumíname con la luz de tu mirada.