La vi en los brazos del otro,
Lo abrazaba enamorada,
Yo sentí que se quebraban:
Mi alma, corazón y todo;
Saludé con gran decoro,
Con una sonrisa forzada;
Yo por dentro preguntaba
¿Por qué pasó de ese modo?
Si por ella renuncié
A mi vida, a mi mentira,
Todo en ella lo dejé;
Pero, la veo perdida,
Y con ella mi gran fe:
Me quedó sólo agonía…