Lissi

Nido de Torcazas

Era casi de madrugada y el silencio reinaba en el patio,

¡Qué cosa tan rara! yo me decía, si ayer una fiesta se armó

los cenzontles, clarineros y todos los pájaros aquellos

con su usual algarabía, en turnos entonaban cada uno sus trinos.

Hoy parece que la sinfonía se trasladó a otros confines,

El cocotero y el tamarindo tienen vacías sus ramas

esto no es normal, no tiene sentido.

He despertado porque mi reloj interno

así lo ha demandado,

mi alarma es el canto de la torcaza,

esa tampoco ha aparecido.

¡Que cosa tan rara!

Busco en el silencio de la fría mañana,

ni una hoja se mueve, el clavel y la rosa

agachados los he encontrado.

Voy abriéndome paso entre las enredaderas,

el jardín está enmudecido, el viento travieso

ha hecho una cruel travesura,

ha bailado con premura y el nido…

Oh, el nido…de torcazas, se ha ido…