Si mi enunciado ante ti no ha cambiado,
es por la simple razón, de que me sentí
escuchada.
Si mis ojos, no dejan de verte
es porque aman lo que están mirado
Si esta alegría, desparrama risas
y me siento feliz, al verte sonriente.
Aún, serás esa asignatura, de juntos para siempre.
Y entonces renuevo, lo que una vez te dije:
-Te llenaré de besos y caricias
-Te amaré, sin amarrarte
- Si te pierdes, te rescato
-Aunque me olvides, te seguiré amando
-Y si por alguna razón, me das muerte,
en tu corazón y en tu mente, renaceré
en una flor y será la que te cuente,
que he nacido para amarte,
aunque, yo no esté presente.