Cada mañana me pregunta por ti.
Le contesto: que te fuiste temprano.
En las noches me pregunta ¿por qué no has llegado?
Le contesto: que se duerma, mas tarde llegas.
Me despierta por las noches buscándote.
Ya no se que contestarle.
Como le explico que nunca te volverá a ver.
Lo he encontrado en ocasiones llorando.
Viendo por la venta, buscando tu sonrisa.
Buscando una llamada, un texto o un mensaje.
“Ya no he visto su taza de café en la meza.
Ni su ropa en la recamara”.
Me dice cada día.
Día a día me pregunta ¿Qué paso?
Mi contestación es la misma ¡Es mejor así!
¿Como le digo?
Que te perdí, que nunca estuviste.
Le he dicho: que nomas fue un sueño.
Me grita: ¡Ella existe!
Lo puede ver en mi rostro.
La tristeza que me causa de no verte más.
Lloro en silencio para que no me vea.
Ya no se que decirle a mi corazón.
“Fue una ilusión”.
Las palabras ilusionan
Mas los hechos enamoran.