La cotorra verdecita
preguntaba cada la mañana
-¿Dónde estás Julita?-
A su regreso de la escuela
Julita, liberaba a la enjaulada,
-¿Dónde estás Julita?-
Quiero galleta y limonada.
Julita la mecía
una canción le enseñaba,
más el ave sin progreso
entonaba la misma melodía.
-¿Dónde estás Julita?-
Ella esperaba su regreso,
vamos a dormir la siesta
hoy no quiero cantos ni gritería,
Julita…le decía, hoy no quiero fiesta.
Una mañana, el silencio…
¿La cotorra, aún dormía?
Julita, al regresar de la escuela
quiso liberar la enjaulada,
más en el piso de su jaula…yacía
la cotorra verdecita.