Es un deseo intrínseco que desgarra la piel,
De esos que nos desbordan y enloquecen
De aquellos incontenibles, que nos hacen perder la tranquilidad
De los que no se sacian tan fácil,
Solo con el calor del otro,
Tan solo con sudor,
Únicamente con el sabor de su ser.
Ese deseo que hace nuestro cuerpo temblar,
Vibrar de placer,
Que hace a nuestra alma unirse con esa otra alma,
Es tal la pasión que nos perdemos en miles de sensaciones y sonidos,
Que nos hace caer en un abismo de éxtasis,
Del que no se quiere salir y en el que anhelamos caer mas profundo...