Asomaba soleada la mañana, un cielo azul,
y gris caía la tarde, cuales mudos testigos,
pero ninguno la marrón tragedia imaginaba,
el flagelo avecinándose por tórridas lluvias,
y la huella trágica, profunda, la tierra dejaba.
Hermosa la naturaleza, verdor de montañas,
vegetación abrazaba caricias al amante clima,
trayendo sus Inclementes aguas que castigan,
y a los humildes seres de infortunio arrastran.
¡Guatemala! ¡Octubre primero! ¡Día funesto!
Cuando peñasco fuerte, inmenso, golpearía,
El Cambray, entre laderas y aquel Pínula rió,
del vulnerable territorio que intrépido corría,
soterrando iba a las almas bajo gritos y barro,
y fueron cubiertos amasijos por la furia natura.
¡Venías deslave! hacia aquel lugar inhabitable,
sembrado de esas pobres gentes miserables,
desesperados cavando ansiosos con sus manos,
de azadones, palos, vasijas y sus esperanzas.
en busca de los seres bajo el alud enterrados.
¡Amarga pobreza! que les obliga a permanecer,
a cientos, en las viviendas precarias de la zona,
covachas humildes donde viven los más pobres,
aun a sabiendas del riesgo de sus propias vidas,
no teniendo mas opción que resignada condena.
Desaparecidos incontables los desafortunados,
llantos desgarradores, repetidos son del viento,
y así lo perdieron todo, a sus amadas familias,
enseres, muebles, mascotas, sueños y gaviotas,
lo más valioso obtenido en sus transitorias vidas.
Vidas plagadas de miseria, pocas oportunidades,
dolientes llevando la pena cargando los cuerpos,
y drama de quienes no tienen a quién enterrar,
el deportista Bonilla, un campeón desaparecido,
dos bomberos y rescatistas varios se inmolaron,
en pos de misión humanos en labor salvadora.
Y un triste final, paralizadas labores de rescate,
no hay nada que hacer, ¡huyen las esperanzas!
nunca más, observadores del mundo, sabremos,
¿Cuantos seres fueron \"Los Soterrados\" vivos?
oscuridad de aquel infierno de piedra y pantano,
regresa trágica calma, y el planeta sigue girando.
Raquelinamor
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001/05/102015